Hay vampiros de verdad
que se cuelgan en la cuevas,
y buscan para su ceba,
una vena en que libar,
y también son un montón
los vampiros de ciudad,
vampiros de largas piernas,
que te enredan con sus telas
y te chupan la
moral,
invadiendo tu interior.
Te acosan por la acera
y en la oficina,
se llenan su morral
con tu energía,
obvia sus actos,
no te dejes seducir
por sus encantos.
Si porfían en tu amparo
cuidado
te taparán todo el sol
con los
mártires y deprimidos,
vampiros
¡Ojo, al que se dice amigo
y solo te cuenta penas!
te arrastrará a su condena
¡Cuidado con los vampiros!
Chus Castro 27/08/2018
Multiestrofa continua asonante
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