No pierdas el tiempo, “killa”,
ha llegado la ocasión,
deja la cola del paro,
empieza la procesión.
No te preocupes María
si no te da pa comer
pa llenarte la nevera,
El Cristo del Gran Poder.
Y, si en serio, te arrepientes
y te esfuerzas en rezar,
la bestia que está en tu casa
te dejará de pegar.
¿Qué no puedes aguantar?
¡hace falta tener morro!
pero si cuidan de ti
Patrocinio y su cachorro.
Si te falta la esperanza,
la de Triana en Sevilla,
rézala con gran fervor
lo arregla todo chiquilla.
Llora al Cristo Redentor
si no soportas la pena
y si su hijo no hace caso
díselo a la Macarena.
Será más dulce tu vida,
se acabará tu dolor,
si te acuestas esta noche
con el Cristo del Amor.
No hay que amargarse la vida,
si se fue la juventud,
te quitará tus achaques
el Cristo de la Salud.
Y si te vas a morir,
no te quejes de tu suerte,
que, para ayudar al trance,
está el de la Buena Muerte.
y aunque estés de vacaciones,
cuidado con el desmadre,
que, aunque muera Jesucristo,
te vigila el Santo Padre.
No sirven las procesiones
para escapar del calvario,
para comer a diario
mejor, manifestaciones.
Ni quejidos, ni oraciones
hacen mella en la codicia,
despierta de tu estulticia,
nadie te lo va a arreglar,
te lo tendrás que currar,
si quieres que haya justicia.
Chus
Castro 28/03/2018
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