Baila alegre el ocaso con la aurora
y, liada con el sol, la luna brilla,
riega triste el balcón la buganvilla,
besa el día a la noche sin demora.
Con la sombra, la luz, ríe y se azora,
en el rojo, el azul, se maravilla,
el silencio en el mar sin miedo chilla
y una nube de sal el cielo escora.
Es molesta la flor en su maceta,
desdeñable el placer, el bien horrible,
generoso el señor, rico el asceta.
Es pesada la paz y el mal sensible,
entrañable el temor, frío el poeta.
Vivir sin ti…también es imposible.
Chus Castro 25/06/2018
Soneto
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